Si bien las medidas de vacunación y restricción son las primeras formas de combatir la infección por Covid-19, el neumólogo y pediatra José Miguel Leal explicó que el sistema inmunológico funcional es una de las claves para reducir el riesgo de contraer la enfermedad. Esta información se proporcionó durante un seminario web de la cadena de suplementos GNC.
¿QUÉ ES EL SISTEMA INMUNITARIO?
En términos sencillos, el especialista definió el sistema inmunológico como un conjunto de tejidos y células que en conjunto defienden al organismo de un virus, bacteria o parásito; Cualquier agente infeccioso que ingrese al cuerpo se reconoce como un “antígeno”.
En el sistema inmunológico, la primera barrera protectora es la piel. Una vez dentro del cuerpo, los linfocitos localizan el “objetivo” para atacar y enviar defensas contra él, lo que conocemos como anticuerpos. Un anticuerpo, dijo el médico, es “como la inteligencia militar” del sistema inmunológico, ya que registra el antígeno cuando ingresa al cuerpo y lo memoriza en el sistema inmunológico como una amenaza, por lo que la próxima vez que la misma amenaza ingrese al cuerpo. .cuerpo. atacado por anticuerpos.
CÓMO MEJORAR EL SISTEMA INMUNITARIO
Leal describió que el ser humano aporta cierta inmunidad desde el nacimiento, además de la inmunidad adquirida a través de vacunas o al atacar un nuevo antígeno en el organismo. En cualquier caso, un sistema inmunológico en funcionamiento “podemos mantenerlo de diferentes formas, pero está bien descrito que la actividad física adecuada puede ayudarnos a mantener nuestro sistema inmunológico de manera óptima”.
El ejercicio, explicó, ayuda a los órganos a mantenerse saludables y con suficiente oxígeno; “Nos ayuda a liberar cuando lo necesitamos”, es decir, a la hora de combatir una enfermedad o realizar acciones de esfuerzo.
Destacó que lo anterior es importante ya que “se han dado casos de pacientes que hacen ejercicio con linfocitos más grandes que los que no practican”, destacando que los linfocitos envían anticuerpos al organismo.
Asimismo, la nutrición juega un papel importante en el fortalecimiento del sistema inmunológico. El doctor Leal dijo que el Programa Mundial de Alimentos recomienda consumir alimentos que te den energía, pero sobre todo, alimentos integrales que mantengan la energía liberada durante mucho tiempo. También se recomienda abstenerse de azúcares, exceso de sal y harina procesada. Un equilibrio adecuado proporciona una buena base para el desarrollo del sistema inmunológico.
LA RELACIÓN ENTRE LAS VITAMINAS Y LOS COMPONENTES CON COVID-19
El profesional describió el consumo de vitaminas como una medida extra de fortalecimiento del sistema inmunológico; aunque distinguió que la única forma de prevenir el contagio es a través del “distanciamiento, usando gel, mascarilla y vacuna; quien tenga acceso a la vacuna, por favor vacunarse ”. “Recuerde que este es un virus nuevo, probablemente es del que tenemos menos información”, dijo el médico.
Las vitaminas y los componentes se pueden obtener a través de los alimentos, sin embargo, existen suplementos que se pueden consumir sin receta. El neumólogo José Miguel Leal destacó tres de ellos que no garantizan inmunidad al virus, pero sí garantizan una mejor protección frente a contraer Sars-CoV2.
VITAMINA D
La vitamina D se produce por contacto con el sol. “Ahora que estamos en las casas, no tomamos el sol”, recordó el médico. Esta vitamina aumenta la inmunidad desde el nacimiento; Además, indicó que los estudios han encontrado que la infección por Covid-19 puede ser más grave en personas con deficiencia de esta vitamina. “Comenzaron a ver que los pacientes con deficiencia de vitamina D necesitaban más hospitalización en comparación con aquellos con buenos niveles de vitamina D”, enfatizó.
Como primera recomendación, sugirió tomar el sol durante al menos 15 minutos al día, ya que “la vitamina D se activa cuando nos exponemos al sol de 15 a 20 minutos al día”. Pero también se puede adquirir a través de alimentos como pescados grasos, huevos y productos lácteos.
Otra característica de la vitamina D es que apoya la salud de los huesos, los dientes y los músculos, regula el azúcar en la sangre, el corazón y los vasos sanguíneos, así como los pulmones y las vías respiratorias.
¿QUÉ PASA CON EL ZINC?
“El zinc es el segundo elemento más importante del organismo después del hierro”, comentó el profesional. Es un elemento esencial en el crecimiento, la reparación de heridas, la tolerancia a los carbohidratos, la síntesis de hormonas testiculares y la respuesta inmune.
La deficiencia de zinc se ha relacionado con una inmunidad reducida y los estudios han demostrado su efecto beneficioso en el tratamiento de la neumonía infantil. Otros estudios también han demostrado cierta disminución en la gravedad y duración de la gripe.
“Es importante para la salud inmunológica porque ayuda a detener la replicación del virus dentro de las células y funciona como una molécula de señalización para las células T del cuerpo, que son los glóbulos blancos responsables de destruir las células infectadas”, dijo en su presentación.
A diferencia de otros elementos, el zinc no es absorbido por el organismo, solo se puede obtener a través de los alimentos; se encuentra en:
– Frijol blanco
– Pescado de marisco
– Queso suizo
– Almendras
– Ajo
– champiñones
– Frutos secos
VITAMINA C
La última vitamina mencionada por el pediatra fue la vitamina C, reconocida por su presencia en los cítricos. Esta vitamina contribuye a la cicatrización de heridas, promueve una piel sana, la absorción de hierro y un mejor estado de ánimo.
Una propiedad importante, según el médico, es que regula la respuesta inmunitaria a través de sus propiedades antivirales y antioxidantes; Además, dijo que reduce la gravedad y la duración de un resfriado común. “Comencé a leer y dije ‘veamos si es cierto’ y se encontró que la duración de los resfriados disminuye, no solo en los pacientes pediátricos”, explicó.
Leal aclaró que la cantidad necesaria de esta vitamina depende de la edad y el sexo, por lo que es recomendable consultar a un especialista para consumir las dosis adecuadas.