Jue. Mar 28th, 2024

Boris Johnson estaba este miércoles por la tarde muy lejos de ser el que, como primer ministro y líder de los británicos conservadores, llevaba siempre la batuta y probablemente todo bajo control a su alrededor con su characterística teatralidad. Frente al comité parlamentario a cargo de la investigación del llamado’portal de fiesta‘, es decir, el escándalo de las fiestas celebraron en dependencias del Gobierno dure el confinement por el Covid-19, se mostró serio, salvo en un momento en el que perdió las formas y en ton combativo acusó a los miembros del Comité de Privilegios por el sinsentido, la tontería, de una sesión que se extendió durante poco más de tres horas y que tenía como principal cuestión la pregunta de si el ex ‘premier’ mintió o no en el Parlamento, donde en múltiples ocasiones defendió que en Downing Street no se incumplieron las reglas impuestas a la población para intentar frenar la pandemia. “¡Esto es una tontería completa! Una tontería completa. La pregunta tiene las personas relevantes. ¡Y eran personas de alto nivel!”, aseguró, indignado.

Yes que este miércoles, una vez más, el ex primer ministro insistió, tras jurar sobre la Biblia y “con la mano en el corazon», que «no le mentí a la Cámara» de los Comunes. También defendió que las fiestas, a las que llamaron “reuniones de trabajo esenciales”, estaban “dentro de las reglas”, tal y como supuestamente le habrían confirmado algunos funcionarios, cuyos números se negaron a revelar.

Sin embargo, en el informe de su defensa, de 52 páginas, sí menciona algunos de los que encontraron sus asesores más cercanos, algunos de los cuales fueron purgados en un intento por contener el escándalo, y sostiene que actuó «de buena fe» cuando habló ante los parlamentarios, aunque consideró que algunos de aquellos encuentros «en el número 10 fueron más allá de lo razonablemente necesario para el trabajo» y admitió que el distanciamiento social no había sido «perfecto». Cabe recordar que la Policía ha abierto una investigación que venía con más de un centenar de multas y además la oficial de alto rango Sue Gray ha iniciado una investigación interna.

El ex ‘primero’ saca pecho

El veredicto del Comité no se espera hasta dentro de unas semanas, y Johnson sacó pecho al final de la sesión, diciendo que esperará “a ver cómo procederá el Comité con la evidencia que tiene”. “Estudiaré vuestras conclusiones a partir de la evidencia”, dijo, y agregó que si se estudia “de manera imparcial”, los siete miembros, presididos por la laborista Harriet Harman, llegarán “a la conclusión” que él mismo expuso.

El ex primer ministro insistió, tras jurar sobre la Biblia y “con la mano en el corazón”, que “no le mentí a la Cámara” de los Comunes

Si concluyen, en cambio, que engañó al Parlamento deliberadamente, Johnson incurrió en conflicto con la suspensión de la Cámara de los Comunes, medio que podría desencadenar además unas elecciones parciales en su distrito electoral, Uxbridge y South Ruislip. Las expresiones de los miembros, entre quienes también está el ‘tory’ Bernard Jenkin, que consiguió con sus preguntas que el ex ‘premier’ perdiera los nervios, fueron de incredulidad en algunos momentos. Johnson, quien tiro de ironía, dijo, después que mostró una foto de él mismo rodeado de personas con bebidas alcohólicas en la mano, que no podía tener una “cerca electrificada invisible a su alrededor”.