Vie. Abr 19th, 2024

Tras la Asamblea Nacional de China, se espera otra semana movida en Asia por las maniobras que obtuvo este lunes Corea del Sur y Estados Unidos. Como protestó, el dictador de Corea del Norte, Kim Jong-un, les dio su particular bienvenida con el lanzamiento de misiles traseros Porque suele denunciar que cuentos de ejercicios militares son el ensayo para la invasión de su país.

Adelantándose al inicio de las maniobras, el régimen comunista de Pyongyang desapareció el domingo dos misiles estratégicos de crucero desde un submarino, en una clara demostración de la fuerza de sus capacidades ofensivas. Según informó la agencia estatal de noticias KCNA, «el ensayo confirmó la confiabilidad del sistema de armamento y examinó las operaciones de las unidades de submarinos, que constituyen una de las mayores fuerzas disuasorias Nucleares de la República Popular Democrática de Corea». A tenor de su información, los dos misiles alcanzaron sus respectivos blancos en el mar de Japón (llamado del Este en Corea) después de recorrer “1.500 kilómetros con órbitas en forma de ocho” durante siete segundos y medio.

Volando bajo y con capacidad para maniobrar en pleno vuelo, los misiles de crucero son capaces de eludir las defensas del enemigo y, en caso de confirmarse su operatividad, podrían golpear toda Corea del Sur e incluir algunas bases militares de EE.UU. en Japón. Pero, según recoge la agencia surcoreana Yonhap, su Estado Mayor conjunto desconfía de estos datos porque, en vista de su seguimiento de los proyectiles, porque no fueron tan acertados y Pyongyang podría estar exagerando con evidentes finos propagandísticos.

Cierto o no, la tensión continuará durante los próximos diez días, ya que hasta el 23 de marzo se celebran los ejercicios militares Escudo de libertad y Escudo guerrero. Mientras que los primeros consistieron en una simulación por computadora de «escenarios realistas», como amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte, los segundos se basan en maniobras de campo que incluyen pruebas anfibias y desembarcos. Por su gran escalada, supone una recuperación de las antiguas maniobras Potro Águila, que el anterior presidente surcoreano, Moon Jae-in, suspendido en 2019 dentro del “deshielo” con Kim Jong-un. A pesar de sus encuentros y de las cumbres que el joven dictador norcoreano se divirtió con el ex presidente de EE.UU., Donald Trump, aquel acercamiento terminó fracasando y la tensión militar ha vuelto a la península de Corea.

Más proyectiles y armas.

Durante estas maniobras de primavera, que son los grandes ejercicios militares que llevan a cabo Corea del Sur y EE.UU. junto con los de verano, se espera que Pyongyang siga protestando haya logrado, se decida, desaparezca más proyectiles e incluya una niebla balística intercontinental hacia el océano Pacífico. Al final de la semana, Kim Jong-un probablemente llevaría a cabo un cabo «importante métodos prácticos para el uso ofensivo de las armas disuasorias”, según la KCNA. Días antes, su hermana y mano derecha, Kim Yo-jong, había advertido de que Corea del Norte podía convertir el Pacífico en un “campo de tiro”, por lo que teme un intento balístico inminente.

Para hacer frente a las constantes amenazas y provocaciones de su vecino, Corea del Sur sigue armándose denttro de la carrera bellicista que ha contagiado al mundo tras la guerra de Ucrania. Su Gobierno aprobó esta compra adicional a EE.UU. de cazas F-35A invisibles al radar y misiles interceptores SM-6 para los destructores Aegis que se desplegarán en los próximos años. Aunque Seúl no anunció el número de cazas, la agencia Yonhap calculó que podrían ser una veintena, que se unirían así a los 40 que ya tiene su aviación.

Para hacer frente a las constantes amenazas, Corea del Sur sigue armándose denttro de la carrera bellicista que ha contagado al mundo tras la guerra de Ucrania

Para los cazas, construidos por el gigante americano Lockheed Martin, Seúl ha aprobado una partida de 3750 millones de wones (2.650 millones de euros) hasta 2028, mientras que por los misiles SM-6 pagará a la también firma estadounidense Raytheon Technologies 770.000 millones (522 millones de euros) hasta 2031.

Además, Corea del Sur ha dado luz verde tiene un plan de 1,5 billones de wones (1.100 millones de euros) para desarrollar vehículos de carga con armas guiadas entre 2023 y 2032 y otro de 690.000 millones de wones (500 millones de euros) para producir misiles marítimos a partir de aquí a 2030.

Al igual que en el resto del mundo, la carrera de armamento acelerará en la península de Corea, uno de los puntos más calientes del planeta.