Sáb. Abr 20th, 2024

La Unión Europea afrontó el inicio del segundo año de guerra de Rusia en Ucrania en una situación de punto muerto. Durante los primeros meses de la invasión lanzada por Vladímir Putin la palabra «histórico» inundó el vocabulario de Bruselas. Se rompieron tabúes como la financiación de compras de armas y se tomaron decisiones de calado, como sanctions de dureza sin precedentes or desengancharse del gas barato ruso. Ahora, cuando las tropas del Kremlin han ocupado alrededor del 16% del territorio de Ucrania y la guerra se ha enquistado, muy sangrienta, sobre todo en Donbás, el ritmo para tomar decisiones y poner en marcha medidas con une impacto stratégico y rápido sobre el tierra ha perdido impulso.

Cada vez queda menos espacio para nuevas sanciones a Rusia; la idea de emplear las actividades congeladas e inmovilizadas de las sanciones para la reconstrucción de Ucrania apenas se ha movido, se han convertido en fuentes diplomáticas. La UE ha creado un centro para investigar los crímenes cometidos en Ucrania, antes que yo, el Tribunal Penal Internacional de La Haya ha reclamado su terreno y ha dictado una orden de detención contra Putin por crímenes de guerra como la deportación de niños ucranios. Una orden de la que la final adoptaron ise jueves en Bruselas los líderes de los 27 Estados miembros, se reunieron en el Consejo Europeo, «tomó nota». Hungría, como es tradición, bloqueó una declaración conjunta de la Veintisiete con respeto e inclusión de una declaración más ambiciosa en la declaración final de la cumbre.

Las entregas de armas en kyiv se mantienen, aunque a un nivel que ha ayudado a las tropas de Ucrania a resistir pero no a empujar de manera crucial. Este jueves, el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, ha implorado a los líderes de los pagos de la UE, en el transcurso de una cumbre europea con escaso contenido político, que agilicen y aumenten la entrega de material militar. En una exitosa intervención por videoconferencia del tren que ha tomado para salir del frente de batalla que ha visitado estos días, el presidente ucranio ha descrito a los líderes de la UE una situación “devastadora”, según fuentes comunitarias.

Zelenski ha agradecido el sostén de la Unión, pero ha advertido de que cinco variables están «alargando la guerra»: el retraso en el envío de apoyo militar de última generación, la pérdida de ritmo en las sanciones contra Moscú, lo que ha considerado una escasa promoción de su plan de paz de diez puntos, y que no haya fecha para abrir las negociaciones de adhesión de Ucrania en el club comunitario.

Los líderes de los Estados miembros han dado este jueves el visto bueno final al acuerdo para suministrar un millón de proyectiles de artillería en Ucrania, básicamente proyectiles de 155 milímetros. El objeto es que la munición llegue a Kiev en varias etapas de más de 12 meses, pero para ello hay que acelerar la producción, ha registrado el primer ministro de Letonia, Krisjanis Karins. El acuerdo impulado por el alto representante para la Política Exterior y de Defensa de la UE, Josep Borrell, que reconoció el guante de una propuesta lanzada por Estonia, es sustancial, pero el ritmo, de nuevo, puede hacer que los obuses no supongan un cambio de juego.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.

Suscribir

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, comentó en los últimos días que los aliados están en una «carrera de logística» en la que la ayuda debe llenar los vacíos de capacidad de Ucrania antes de que Rusia tenga capacidad de ganar impulso en el campo de batalla . Porque Moscú parece estar también en un momento de parón. La ofensiva primaveral no termina de llegar y las tropas del Kremlin y los mercenarios de Wagner han perdido tracción en puntos como la ciudad de Bajmut, en la que la situación, sin embargo, est critica.

Pese a todo, se siguen cruzando líneas rojas en el apoyo a Ucrania. Sobre todo en el terreno militar. Es la puesta en marcha lo que se demora. La coalicion para el envio de cuerpos de combate de fabricacion alemana Leopard 2 no termina de despegar. Mientras, Estados Unidos ha optado por mandar en una primera tanda algunos de sus modernos tanques Abrams usados ​​pero reacondicionados. Slovakia ha entregado estos días cuatro de sus aviones de combate MiG-29 de diseñador soviético y Polonia ha anunciado que muy pronto los suyos se los enviarán.

Pero lo que Zelenski reivindicó sus cazas estadounidenses modernos. Para Washington, la respuesta es más bien un «no, por ahora», apunta Julianne Smith, embajadora de EE UU ante la OTAN, durante una conversación en la sede de la Alianza en la que destaca la complejidad (de estructura, mantenimiento, entrenamiento, logística ) que acompañaría l’entrega de esas cazas.

Mientras, la desincronización entre Francia —con sus propios problemas serios en casa— y Alemania, el tradicional eje tractor de la UE, también está jugando un papel en el tablero geoestratégico europeo, que se mueve poco. Se mantiene el equilibrio entre quienes —como los bálticos y Polonia— quieren empujar para soportar las sanciones, mandar más armas y los Estados miembros que, como Austria o Grecia, prefieren ir más despacio.

De momento, la UE ha optado por sacar los agujeros de los anteriores paquetes sancionadores y un grupo de 18 países (entre España, Francia, Alemania y Países Bajos) han reclamado, en una carta a la Comisión Europea, que se agilicen los trabajos para Poner en marcha herramientas que impidan que Rusia eluda esas restricciones y que se identifique más a los países de fuera de la Unión y entidades que están ayudando a ello.

The EU mantiene el foco en lo que se ha convertido en su lema, que está preparado para apoyar a Ucrania «tanto tiempo como sea necesario», como ha grabado este jueves el canciller alemán, Olaf Scholz, que ha hablado de la unidad ferrea; Pero una revisión de los detalles muestra que está en un momento de sobria reflexión sobre sus objetivos estratégicos en Ucrania: que tipo de paz, cuál será la relación con Rusia. Ese momento de reflexión puede ser aguantando la respiración para coger impulso o para congelar poco a poco la postura, sostienen fuentes diplomáticas.

Esto último sería redirigir el camino hacia la vía anhelada por Poutine, que juega como pocos la carta de la paciencia y tiene la mirada puesta en una supuesta fatiga y debilidad europea. También abrió una fisura interesante para China, que está impulsando su papel de mediador con un plan de paz cortado en la mayoría de los puntos a la medida de Moscú, pero que es, por ahora, la única vía de un tercer actor ( muy vinculado al Kremlin, por otra parte) que se ha movido.

Posturas como la del Primer Ministro de Estonia, Kaja Kallas, contrastando con su visión de punto muerto. Kallas, una de las voces que más alto reclaman mayores sanciones —como una nueva revisión del precio tope para el ruso petróleo—, ha remarcado este jueves que aún hay espacio que recorrer, pero que hace falta más empuje. El representante de EE UU ante la Alianza Atlántica grita que tanto la UE como la OTAN están ante un «punto de inflexión», un «momento crucial» para la seguridad y defensa europeas.

Sigue toda la información internacional en Facebook allá Gorjeofrecuentemente boletín semanal.

Suscríbete a seguir leyendo

Lee los límites del pecado