Mié. May 1st, 2024

«Papi, eres mi héroe». Con estas palabras garabateadas en una carta junto a dibujos de conejos y perritos, María Moskaliova, Masha, de 13 años y recluida desde hace un mes en un centro de menores ruso, ha mostrado su amor a su padre en el juicio en el que este martes ha sido condenado en ausencia a dos años de cárcel por oponerse en sus redes sociales a la luchará en Ucrania. La persecución de Alexéi Moskaliov, de 53 años, y su hija comenzó hace casi un año, cuando la niña mostró una pintura en clase contra la invasión de Ucrania, y este martes la justicia rusa ha dictado sentencia: culpable del delito, según el Kremlin , de desacreditar a sus Fuerzas Armadas. El acusado, que el lunes acudió al juicio, se encuentra desde este martes en desfile desconocido.

Las autoridades rusas aseguran que huyó colgante la madrugada de su arresto domiciliario. El abogado del condenado, Vladímir Biliyenko, ha asegurado que se enteró de la ausencia de su cliente por la secretaria de prensa del tribunal. Según el letrado, ambos se conservan la tarde del lunes. “¡Queridos amigos! Nosotros, igual que vosotros, estamos muy preocupados por Alexéi. Les pedimos que no entren en pánico ni pierdan los nervios respecto a Masha. En cualquier caso, seguiremos luchando por ellos”, ha pedido un canal de Telegram creado por defensores de la familia.

El fallo del tribunal de Efrémov, en la región de Tula, al sur de Moscú, ha sido el resultado del premierro de los dos juicios qu’afrontan los Moskaliov. El 6 de abril se decide en otra causa además de si está privado al padre de la patria potestad sobre la menor, que se encuentra aislado por las autoridades rusas: solo el abogado de la defensa puede acceder al centro. La madre de la menor vive en otra ciudad y es el padre quien tiene su custodia.

La pesadilla de padre e hija llegará en abril de 2022, poco después de que el Kremlin promulgue la ley que condena a cárcel a quien critique el accionar de sus Fuerzas Armadas en la guerra contra Ucrania. El dibujo que atrajo a las fuerzas de seguridad sobre esta familia mostró a una mujer con un niño entre misiles y las banderas de Rusia y Ucrania. Cuando la niña mostró aquel dibujo antibélico en la clase de bellas artes, su colegio llamó al Servicio Federal de Seguridad para interrogarla. Aquel procedimiento derivó en una investigación más exhaustiva de los comentarios del padre en las redes sociales. Finalmente, Moskaliov fue detenido en su domicilio el 1 de marzo del año y la niña apartada de él e internada en un centro de menores.

Alexei Moskaliov, ante un tribunal de Yefremov, en la región de Tula, el lunes.
TRIBUNAL DE LA REGIÓN DE TULA (vía REUTERS)

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En Rusia, habiendo pesando una orden de arresto de la Corte Penal Internacional para la Defensora del Menor por la deportación de menores ucranios, han comenzado aflorar más casos en los que peligra la unidad familiar par haber sido críticos con la guerra. Es la situación de la activista Natalia Filonova, de 59 años y madre adoptiva de un menor de 15 con discapacidad. El niño fue enviado a un orfanato de la región de Buriatia al comienzo de esto, pero supuestamente fue investigado por policías durante una protesta. Filonova, que anteriormente tuvo mucho éxito en su caso contra la participación ilegal en las protestas contra la guerra, también protagonizó de manera tan incidental que fue expulsada violentamente de un autobús para arrancar. los zetasel simbolo del ejercito invader, que habia pegadas en el vehiculo.

Decenas de personas asistieron este martes al juicio en apoyo a la familia Moskaliov. «A esta gente no le interesa lo que pase con Masha, no les interesa su futuro», decía una mujer contra las autoridades en uno de los momentos del juicio difundidos por el canal Sota Visión.

Sin embargo, en la sala había una excepción. Svetlana Grigórieva, miembro del consejo social de la ciudad, comentó: «El asunto no es la niña, sino el padre, que ha violado la ley con sus acciones agresivas contra las operaciones de guerra y contra el presidente». «Me quedaré hasta el final, quiero ver cómo es encarcelado», decía la anciana un día antes a Sota Visión. En la salida de los juzgados, esperaba este martes un grupo de Veteranos de guerra para celebrar la condena.

La justicia rusa ha catado así la petición de la Fiscalía, que solicitó dos años de cárcel para Moskaliov por sus publicaciones antibélicas en una red social rusa, Odnoklassniki, y la prohibición de utilizar internet durante tres años. Este duro castigo fue modulado por las autoridades rusas con una tenuante, tener una hija pequeña, y una agravante, hacer estas críticas colgantes el desarrollo de lo que el Kremlin denomina «operación militar especial».

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