Mié. Sep 11th, 2024
Presupuesto 2022: la clave de la nueva alianza y la futura Junta Directiva
Actualmente, prevalece la incertidumbre en la alianza oficial que encabeza Allan Rodríguez, frente al hecho más importante para el Congreso: la aprobación o desaprobación del proyecto de ley de presupuesto 2022. Foto: La Hora

En estos últimos meses de 2021, el Congreso de la República se verá envuelto en dos contextos principales: la elección de un nuevo Consejo de Administración y la aprobación o desaprobación del presupuesto general de la Nación. Mientras se agota la alianza gobernante, el presidente Alejandro Giammattei tendrá que recurrir a alternativas para recuperar el apoyo de los diputados.

EL DEBILITAMIENTO DE LA ALIANZA OFICIAL

Con la desaprobación del Estado de Calamidad establecido en el Decreto de Gobierno 8-2021, la alianza gobernante acumula dos retrocesos en el Legislativo. La primera separación de este pacto se presenció entre el 13 y el 23 de agosto de este año, cuando el presidente Giammattei anunció el primer Estado de Calamidad y 10 días después cuando los diputados lo rechazaron.

El Decreto 6-2021 constituyó uno de los dos Estados de Calamidad rechazados por el Ejecutivo. Con 103 votos en contra del decreto, solo 54 a favor y 3 ausentes, la medida fue derrotada; Asimismo, con 122 votos a favor, se aprobó la moción privilegiada de Allan Rodríguez por desconocer las reformas al Estado de Calamidad en el Decreto 7-2021.


Si bien la Corte Constitucional (CC) ordenó la aprobación, desaprobación o modificación del Estado de Calamidad por mayoría absoluta (81 votos), la Junta Directiva propuso un precedente para definir la forma de conocer el decreto, pero no fue aprobado con 106 votos en contra, 51 a favor y 3 ausentes. En cualquier caso, el partido gobernante no aprobó el Estado de Calamidad.

La diputada Lucrecia Hernández Mack destacó en Twitter: “Como el oficialismo no sabe si tiene 81 votos para ratificar el Estado de Calamidad, ahora están inventando un procedimiento para qué. Si no se aprueba, se somete a votación la desaprobación ”. Luego, el presidente del Congreso pidió un receso de 20 minutos antes de la próxima votación.

“Hay una agenda y de acuerdo a esto, una vez ganado el precedente, procedemos a la votación y estamos listos para votar”, dijo Bernardo Arévalo, mientras que el diputado Manuel Rivera especuló que las acciones de la Junta Directiva correspondían a un aplazamiento de la votación.

Mientras se agota la alianza gobernante, el presidente Alejandro Giammattei tendrá que recurrir a alternativas para recuperar el apoyo de los diputados. Foto de la presidencia.

SEGUNDO ACUERDO DE OFICIALISMO

El segundo revés contra el oficialismo se produjo con la desaprobación del Decreto 8-2021, un segundo Estado de Calamidad en el supuesto seguimiento a la pandemia COVID-19. Al igual que la medida anterior, no fue aprobada por el Congreso de la República.

La sesión finalizó con 81 votos a favor del rechazo del Estado de Calamidad, 69 en contra y 10 ausentes. Sin embargo, cabe señalar que el anterior Estado de Calamidad fue apoyado por 54 diputados y en este último por 77.

En la tercera lectura del decreto, obtuvo solo 77 votos, que se fueron sumando poco a poco, mientras Rodríguez realizaba convocatorias por más de 40 minutos.


VÍSPERA DE LA NUEVA JUNTA DIRECTIVA

En los próximos meses, el Congreso de la República deberá elegir la nueva Junta Directiva. Actualmente está presidido por Allan Rodríguez del partido oficial Vamos, al que se suman los vicepresidentes Sofía Hernández de la UCN, Lucrecia de Palomo de Valor y Armando Damián Castillo de Viva.

Aunque la Junta Directiva se apoyó en los escaños de Vamos, UCN, PAN, UNE, FCN-Nación, Viva, Creo, Podemos, Todos y Prosperidad Ciudadana, durante las últimas sesiones para conocer los Estados de Desastre, hubo una separación. entre diputados que anteriormente correspondían a las decisiones del oficialismo.

VIEJOS ALIADOS SE RASGAN LA ROPA

En la discusión de los decretos 6-2021 y 8-2021, algunos diputados se pronunciaron en contra del Estado de Calamidad bajo la premisa de proteger los Derechos Humanos y evitar la corrupción en el Estado. Este es el caso de Álvaro Arzú Escobar quien indicó que el Estado Calamidad solo permitía compras por excepción, pero no brindaba ningún beneficio a los ciudadanos.

“Este estado de calamidad no tiene nada que ver con la lucha contra la pandemia. El objetivo real es que todas las dependencias gubernamentales puedan realizar compras por excepción, sin recurrir a la Ley de Licitaciones. Por eso insisten en que se mantenga en vigencia ilegalmente durante 30 días ”, dijo en Twitter el 21 de agosto.

Asimismo, respecto al Estado de Calamidad en el Decreto 8-2021 afirmó: “La bancada sindical votará en contra del Estado de Calamidad”, anunció, “y votaremos en contra porque no creemos que la solución a esta pandemia sea la forma de restringir más libertades y más derechos para los guatemaltecos ”, explicó.

Arzú concluyó que “no podemos permitir que el gobierno siga restringiendo nuestras libertades y violando nuestros derechos constitucionales” y agregó que la medida cerraría “más negocios”, rompería “más empresas” y dejaría “a más personas sin sueldo”.


Julio F. Lainfiesta, de Unión por el Cambio Nacional (UCN), y Juan Carlos Rivera, del banquillo de Victoria, también se pronunciaron en contra.

¿CÓMO RECUPERAR LA ALIANZA? EL DINERO DEL PRESUPUESTO

En este contexto de incertidumbre entre la alianza oficial, se presenta el evento más importante para el Congreso: la aprobación o desaprobación del proyecto de ley de presupuesto 2022.

Desde 2018, el presupuesto general no ha sido aprobado por el Congreso, pero este año, si Giammattei busca el apoyo de los diputados, tendrá que optar por otros nuevos para repetir las medidas que le dieron una aprobación “momentánea” en 2021.

Cuadros clave, obras y designaciones son las viejas herramientas con las que se alcanzaron, son y serán los “acuerdos” en el Congreso de la República.

Con la desaprobación del Estado de Calamidad establecido en el Decreto de Gobierno 8-2021, a pesar de los “esfuerzos” de Allan Rodríguez por obtener votos, el pacto de gobierno vivió sus momentos más oscuros. Congreso de fotografía.

El 2 de septiembre, el Ministerio de Finanzas Públicas (Minfin) presentó el proyecto de presupuesto nacional para 2022, que pone en riesgo Q103.992 millones para su ejecución. Además, cada año los analistas alertan sobre el interés que genera la Lista Geográfica de Obras, que puede ser utilizada como moneda de cambio.

Si el presidente quiere que se apruebe el presupuesto, debe garantizar 81 votos a favor de los diputados o 107 votos si se aprueba en una emergencia nacional, lo que no será fácil considerando que el oficialismo ha perdido aliados en algunos miembros de los valiosos Bloques. Viva y el Partido Unionista.

A partir de este relato, en un plazo de 84 días a partir de hoy, continuarán las negociaciones sobre el presupuesto general de la nación y definirán parte del tercer año de mandato del presidente Alejandro Giammattei.


¿CUÁL ES LA PRÓXIMA ETAPA PRESUPUESTARIA?

El Congreso de la República tiene hasta el 30 de noviembre para aprobar, desaprobar o ratificar el proyecto de presupuesto para el año siguiente. Asimismo, el legislador debe conocer el anteproyecto y remitirlo a la Comisión de Finanzas Públicas y Moneda, para que se inicie el proceso de análisis y discusión.

Además, se encuentra pendiente en el Congreso la aprobación de las audiencias públicas de cada una de las instituciones que reciben recursos del Estado para justificar el monto solicitado y el plan de inversiones que con él se ejecutará en beneficio de la población guatemalteca.

En los próximos meses, el Congreso de la República deberá elegir a la nueva Junta Directiva y esta volverá a poner de relieve las alianzas que puedan surgir entre los bancos. Fotografía. Congreso.