Los medicamentos para la obesidad están generando entusiasmo para rivalizar con los chatbots y las computadoras cuánticas. Wegovy, un medicamento inyectable, Ozempic y varios otros tratamientos para la diabetes se han vuelto virales en las redes sociales. Elon Musk y las celebridades de Hollywood dicen que usaron las drogas para perder peso.
Un efecto secundario de los tratamientos, que utilizan una hormona para regular el apetito, debería ser el escepticismo. Las drogas milagrosas, desde Valium hasta Zantac, tienen un historial de consecuencias no deseadas. Pero al menos una institución adelgazante está dando a los tratamientos para la obesidad un aparente voto de confianza: WeightWatchers.
Ahora llamado WW International, compra Sequence, un operador de telesalud que puede recetar medicamentos, incluidos Wegovy y Ozempic. El trato de $106 millones es pequeño. Pero un aumento de hasta el 48% en el precio de las acciones de WW el martes sugiere que el mercado cree que el acuerdo puede inclinar la balanza a favor de la empresa.
Los inversores están, con razón, encantados. La obesidad afecta aproximadamente a 650 millones de personas en todo el mundo. Casi la mitad de los estadounidenses serán obesos para 2030, según un estudio de Harvard. Alrededor del 18% del gasto en salud se dedicaría entonces a condiciones relacionadas.
Morgan Stanley cree que el mercado de los medicamentos para el control del peso podría alcanzar los 54.000 millones de dólares en siete años, incluidos 31.500 millones de dólares solo en los Estados Unidos.
Las compañías detrás de los nuevos tratamientos para la obesidad están en alza. Novo Nordisk, el grupo danés que fabrica Wegovy y Ozempic, generó 16.900 millones de coronas danesas (2.400 millones de dólares) en ventas de tratamientos para la obesidad el año pasado. Sus acciones han subido un 40% durante el último año. Eli Lilly, cuyo medicamento para la diabetes tirzepatida se espera que obtenga la aprobación regulatoria para tratar la pérdida de peso este año, aumentó un 19%.
Ambos cotizan con altas primas frente a Pfizer, cuyas acciones cayeron un 16% a medida que se desvanecía el auge de las ventas de vacunas contra el covid-19.
La demanda de drogas es alta. En Estados Unidos, el desafío será convencer a las aseguradoras y al gobierno de que les paguen. A $1349 por cuatro inyecciones semanales por mes, Wegovy está fuera del alcance de la mayoría de los estadounidenses, especialmente de los grupos de bajos ingresos donde la obesidad es rampante.
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